domingo, 25 de mayo de 2014

Cuento " En el lejano Oeste"

Aquí os dejamos con un cuento muy divertido, titulado "En el lejano Oeste". Esperamos que os  guste.

   Érase una vez, en el lejano Oeste, una tribu de indios y un regimiento de americanos, que se habían declarado la guerra. Los indios, cogieron sus caballos (1). Al poco rato de cabalgar, llegaron al desierto de arena (2), en donde soplaba el viento (3).
  Con gran esfuerzo lograron cruzar el desierto y siguieron cabalgando (1). De pronto, se encontraron con las Montañas Rocosas (4). Les costó atravesarlas debido a la gran cantidad de piedras, pero al fin lo consiguieron y siguieron cabalgando (1).
    No se dieron cuenta que el cielo se había llenado de negros nubarrones. De prontoempezó a llover. Un gotita… (5), dos gotitas… (6), la lluvia arreciaba (7), hasta que cayó un buen chaparrón (8). Un rayo cruzó el cielo (9), y no tardó en oírse el trueno (10). Pero en el Oeste las tormentas duran muy poco y la lluvia empezó a disminuir (7). 

  A lo lejos, divisaron en la pradera, a los indios que les estaban esperando. Un soldado tocó la corneta, y empezaron a disparar. Los americanos con sus rifles (11), y los indios con sus flechas (12)… Y los americanos (11),… y los indios (12). Pero como unos y otros estaban muy lejos y no tenían muy buena puntería, a los americanos se les acabaron las municiones y a los indios las flechas.


  No hubo ni muertos ni heridos porque tanto las balas como las flechas se habían perdido en la distancia. Estaban muy cansados de tanto luchar y así decidieron volver todos juntos a casa. Cogieron sus caballos (1) y emprendieron el camino de regreso. Allí seguían las negras nubes y empezó lentamente a llover (5, 6, 7, 8). Un rayo iluminó el cielo (9), y el ruido del trueno les recordó que debían resguardarse de la lluvia, que muy pronto escampó (7, 6, 5). Siguieron cabalgando (1)

  Cruzaron de nuevo las Montañas Rocosas. Esta vez les costó mucho debido al cansancio pero siguieron cabalgando (1). Estaban llegando al desierto de arena (2), donde seguía el viento (3). Finalmente, casi extenuados, salieron del desierto y siguieron cabalgando (1), pero estaban contentos porque ya se divisaban en el horizonte las primeras tiendas del poblado y detrás de una pequeña colina estaba situado el fuerte.


   Tanto los indios como los americanos vieron que la guerra no había servido para nada y se dieron cuenta de que era mucho más bonita la amistad. Y aquella noche, bajo las estrellas, alrededor de una hoguera, se reunieron todos juntos. Cantaron una bella canción y fumaron la pipa de la paz. (Ruido de los indios).


Leyenda:
1. Percusión corporal sobre las piernas imitando el galope de los caballos.
2. Frotarse las manos imitando el sonido de la arena.
3. Soplan imitando el viento.
4. Con los puños cerrados percutir con los nudillos imitando el sonido de las piedras.
5. Percutir con un solo dedo sobre la palma de la mano.
6. Percutir con dos dedos sobre la palma de la mano.
7. Percutir con tres dedos sobre la palma de la mano.
8. Palmas muy rápido.
9. Tziu (expresión verbal) Al mismo tiempo, con un dedo se dibuja el rayo en el aire.
10. ¡Brum! (expresión verbal).

7 comentarios: